Cultura y tradición del centollo en la cocina española

El centollo o centolla es un crustáceo de gran tradición en la gastronomía española, especialmente en regiones costeras como Galicia, Asturias, Cantabria y el País Vasco. Su aspecto robusto, con un caparazón rugoso y patas largas y espinosas, lo convierte en una de las joyas del mar más valoradas en la cocina ibérica. Más allá de su sabor único y su versatilidad en los fogones, el centollo también tiene un profundo arraigo cultural en las comunidades que lo pescan y lo disfrutan.

Esto se debe en gran medida a la pasión por la gastronomía marítima que se vive en todo el país, y a lugares emblemáticos como La Lonja del Mar. Si eres amante del marisco y estás en Madrid, este es el lugar donde debes estar.

Un marisco de temporada

El centollo es un manjar de temporada, y su mejor época de consumo suele ser en los meses fríos, generalmente de noviembre a marzo. Durante este tiempo, el crustáceo alcanza su máxima calidad debido a que las aguas frías favorecen su desarrollo. En Galicia, por ejemplo, la «campaña del centollo» se convierte en un evento significativo, marcando el inicio de la pesca artesanal en zonas como las Rías Baixas, donde se captura utilizando nasas o redes específicas que respetan el medio ambiente y aseguran la sostenibilidad de la especie.

La tradición pesquera

La pesca del centollo es una actividad ancestral que ha evolucionado con el tiempo. Los pescadores locales, muchos de ellos con conocimientos transmitidos de generación en generación, emplean métodos tradicionales que no solo garantizan la calidad del producto, sino que también protegen los ecosistemas marinos. Las lonjas de pueblos costeros, como las de O Grove o Burela, se llenan de vida durante la temporada, cuando las subastas de centollo atraen tanto a profesionales de la restauración como a particulares.

El centollo en la gastronomía

En la cocina española, el centollo se valora tanto por su carne blanca y jugosa como por su característico «coral» o contenido interior, que aporta un sabor marino intenso. Entre las preparaciones más icónicas se encuentran:

  • Centollo a la gallega: Se cuece el centollo en agua con sal y hojas de laurel, destacando su sabor natural. Es una de las formas más populares y sencillas de disfrutar este marisco.
  • Txangurro a la donostiarra: En el País Vasco, el centollo se desmenuza y se prepara con un sofrito de cebolla, pimiento y tomate, todo ello servido en su propio caparazón y gratinado con pan rallado.
  • Ensaladas y rellenos: Su carne también se utiliza en ensaladas frescas o como relleno en platos más elaborados, acompañando vinos blancos de denominaciones como Albariño o Txakoli.

Descubre el sabor y texturas del centollo en La Lonja del Mar

Si eres un amante de la buena comida, no puedes dejar de visitar La Lonja del Mar para descubrir por ti mismo por qué nuestro centollo es tan especial. Cada detalle, desde la selección del marisco hasta la presentación en el plato, está cuidadosamente pensado para ofrecerte la mejor experiencia gastronómica.

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